Condúceme ..

Junto a al ramo de flores que recibí esta mañana una pequeña nota  decía:

“Siempre mía, siempre tuyo”

Paso por ti a las 8pm

Salgo de la ducha, y siento que hoy  me hará gozar de toda la pasión que no hemos podido tener en esta semana,  porque hemos tenido visitas en casa.  Así que me arreglo para él, me pongo en todo el cuerpo la crema que me regaló porque le encantó su aroma, uso la lencería  negra con encaje que tanto le enciende y me quedo así mientras me dirijo a maquillarme.

Me concentro en enfocar la atención en mis ojos que tanto admira cuando me tiene cerca, usando una sombra ahumada y pongo rímel en mis pestañas, arqueo bien mis cejas, el toque final lo da un rubor bronce y el brillo en tono natural en mis labios. 

   

Suena un mensaje en mi celular, veo de quién es y claro de quien mas... de mi gran amor, recordándome que esté puntual.  Respondo, ¡lo sé amor¡

Corro a mi closet y se me ocurren miles de combinaciones, pero después recuerdo lo mucho que le gusta usar sus dientes para quitarme la ropa entonces se me ocurre ponerme algo que sí lo mantendrá bien ocupado, pero como no sé a dónde iremos solo pienso en ponerme lo más sensual posible.  Una vez vestida me pongo mi perfume favorito, mientras sigo ultimando los detalles de mi vestimenta.

Tocan a la puerta de la sala y quedo extrañada de quien será?

Al abrirla , no puedo creer quien está parado en el portal con la mejor de sus sonrisas y diciéndome lo bella que estoy, no puedo contenerme y le pego un beso que nos dejó sin aliento.

Solo entro recojo mi cartera y salgo de la mano de mi hombre, en el carro miradas van miradas vienen y comienzo a tocar su pierna , el sonríe pícaramente y yo siento que él me saca la ropa solo con la mirada.

Antes de llegar al restaurante le digo “tengo puesto lo que más te gusta”  el me mira y me regala esa sonrisa pícara que tanto me excita, mientras baja y abre mi puerta.

Tuvimos la mejor de las veladas: música suave de fondo, velas,  un vino exquisito y nuestra comida favorita;  todo un afrodisiaco…

Al salir de ahí me dijo “nena vamos a un lugar más cómodo”  por supuesto dije yo, pero no necesito llegar vestida ¿verdad?  El entendió mi mensaje, así que me agarró y me besó tan apasionadamente que sentí su erección rosar mi sexo.

Me subí a horcajadas sobre él en el puesto del conductor y seguí besándolo.

Me sacó la blusa y con sus manos mágicas también la falda, me quedé tal cual él quería tenerme.  Mi cuerpo ardía al sentir su erección debajo de mí, ya estaba húmeda del placer que solo sus manos y besos podían lograr.

Sentía un hormigueo en todo mi cuerpo y lo único que pude hacer fue apartar mi interior y permitirle la entrada, él solo siguió mi juego mientras con una mano manejaba y con la otra me tenía agarrada a él… seguí moviéndome a tal punto que tuvo que  detener el carro, no importaba donde estábamos, solo se detuvo y me hizo suya hasta llegar juntos a nuestro propósito….  

El preguntó, nena ¿más cómoda ahora? Solo respondí:

¡MÁS INSACIABLE QUE NUNCA!